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HASTA EL ÚLTIMO SEGUNDO.



Es una novela que he comenzado dos veces, no la abandoné por pesada ni incoherente, sino porque otros escritores me pidieron que leyese su obra. Dos veces publiqué su foto y en la segunda ocasión el escritor me pidió amistad y decidí no abandonarla, siempre y cuando llegase al 20% con algún interés en ella. Y llegué al 40 sorprendida de la historia que tenía en mi Ebook, a pesar de la dificultad que tenía al leerla porque los espacios interlineales estaban muy juntos, los párrafos excesivamente largos, y se cansaba mi vista, pero esto es por mi enfermedad en los ojos, más que por el texto. En este punto decidí observar las opiniones de otros lectores, solo en otra ocasión me quedé tan perpleja como en esta, catalogaban la novela de romántica, sinceramente hasta donde coloqué mi marcador,  algo parecido al amor no había nada. Jack es un muchacho que despierta un día y a trascurrido un año de su vida, debe averiguar qué ha sucedido en  ese tiempo. ¡Enganchada!
Del 40 al 60%, la obra se vuelve más lenta, porque el autor nos describe lo que es la sombra y sus consecuencias en la vida de Jack. Del 60 al 80%, esa oscuridad que lo engulle todo, que no es más que una idea bien definida al principio, se repite una y otra vez, el texto se vuelve pesado. Y en el 80% en adelante, tenemos esa maravillosa historia de amor, un poco Shakespeare, con un desenlace interesante. Sintetizaría la obra para que no fuera tan cargada para el lector en cuanto a esa idea machacona, pero esta genial y sorprende.
También quiero destacar lo bien perfilados que están los personajes, cada uno de ellos define una parte perfecta de nosotros mismos. El cowboy es esa necesidad del hombre de pertenecer a una sociedad; el abuelo representa el amor familiar, pilar de nuestra vida; el padre, el perdón tan necesario para eliminar carga y avanzar; Violeta, la rebeldía; la sombra, la ira…
Muy interesante. Gracias Manuel Ostos Muñoz.





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